Después de varios años en Madrid, por primera vez fui a Arco. Mi opinión iba condicionada por la visión de los malvados medios de comunicación, y quizás por eso salí contento. El porcentaje de cuadros-mancha no es alto pero de eso es de lo que siempre se habla. A estas alturas de historia no seré yo quien pretenda acotar qué es arte y qué no lo es, así que si estamos en una feria de arte lo dejamos en que es arte todo lo que se expone y punto. Tampoco puedo hacer crítica de nada porque no tengo ni zorra. Asi que, cual “comisario digital” de pacotilla, tan sólo me limitaré a reseñar las que me llamaron la atención lo suficiente para detenerme a tomar nota del autor y del titulo, y luego encontrarlas en Internet. Y esto ya es un mérito, porque tras 3 horas dando vueltas, demasiado hace el pobre visitante con mantenerse en pié. ¡Como para encima poder pensar sobre lo que uno esta viendo!

Sólo una crítica: Además de que yo no sé nada de arte, en la feria tampoco te ayudan. Apenas se escribe el nombre del artista y la fecha de la obra. Al contrario que un Museo, ARCO no tiene misión educativa y, sin saber la trayectoria, o el contexto del artista, no entendemos nada y sólo nos quedamos con el mayor o menor placer visual y lo que nos pueda sugerir en los 10 segundos que pasamos mirando algo antes de pasar al siguiente stand.



Sahan. Alex Katz.
Ni pajaros, ni mariposas. Ni atardeceres. Ni geometría, ni colores. En lo artificial, como en la naturaleza, no hay nada mas bonito que una mujer bonita. Yo me quedé un rato hipnotizado con este dibujo de Alex Katz, uno de los padres del pop art. Quedaría de puta madre en mi futuro salón de mi hipotético y sofisticado ático en el centro de alguna parte.

The family III- Marina Abramovic.
Una de las fotografías más famosas de la feria (creo que estaba en dos galerías distintas incluso). Yo la titularía “Como a un santo con dos pistolas”. Bastante manido eso de poner armas a gente que no debería relacionarse con ellas, pero aún así, la imagen sigue impresionando visualmente.

Google will eat itself. UBERMORGEN.COM
El media-art no está muy bien representado en Arco. El premio Beep a la obra electrónica ha ido a la “e-commerce trilogy” Como instalación no es nada especial- Este tipo de proyectos si que chocan con el concepto general de una feria de arte, porque ¿Qué se compra aquí?-, pero el concepto de uno de los componentes de la trilogía me encantó:
“Google will eat itself” pretende llamar la atención sobre la burbuja económica de Google (vale mas en bolsa que todos los bancos suizos juntos) creando una red de páginas que generan beneficios con los anuncios de Google adsense y que son utilizadas para comprar acciones de Google. En unos cuantos años poseerán Google con su propio dinero.

En la galería Max Estrella (creo) había un par de obras de dos de los artistas españoles mas conocidos en el campo de los nuevos medios:Daniel Canogar y Pablo Valbuena. Ambos trabajan con la luz como materia prima y la usan para jugar con nuestra percepción. El primero transforma madejas de cables en chispeantes dibujos en el vacío. El segundo crea ciudades espectrales a partir de simples esculturas poliédricas: Augmented sculpture. Geniales ambos. Por cierto que Canogar tiene una exposición también preciosa, Fuegos Fatuos, hasta el 15 de marzo en el Matadero.

Biktimak
Buscando el arte mas político encontré una fotografía de la escultura “biktimak” instalada en el parlamento vasco. Me parece escalofriante.

También hice esfuerzo por pararme an algún video. Por ejemplo este me gustó mucho: Fiorucci Made Me Hardcore una especie de película hecha partir de retazos de de cinta de otros vídeos en la que muestra la cultura de baile inglesa desde los 70 de una forma bastante peculiar.

La serie de fotos “Parking lots” de Edward Rusha me resultó particularmente atractiva. Un montón de fotografías aéreas de aparcamientos desiertos, un montón de espacio vacío para almacenar el producto colateral de las megaciudades sin trenes unas cuantas horas al día.

Mas series: “Boys and Cars” Marta Soul (gran nombre) nos muestra los contrastes del capitalismo a través de símbolos del consumo y los olvidados del sistema, En este caso los coches de lujo y pobres inmigrantes que nunca podrán comprar esos coches de lujo. Tiene otras series de similar temática como Wellhome. Genial Genial.

También me llamaron la atención pero no las encontrado en la red: “noir et tes” de Jesus Soto, alguna fotografía superguay de Carles Congost y “Nexus” en donde Diana Larrea, Andrés Senra y Felix Fernandez reproducen escenas de Blade Runner ellos mismos.

Terminando
Por cierto que sigo intentando encontrar lo que instintivamente me gusta y lo que no: Creo que no me atrae la pintura mucho, el video arte no lo entiendo (salvo para echar un rato en el youtube) y me gustan las referencias a la cultura popular, la simplicidad, los ambientes urbanos, incluso algo sombrios, y el cut’n'paste.

Como ultima reflexión: No dejo de preguntarme el sentido del comercio de arte con las fotografías y videos. Dejando aparte los precios inflados de todo, no entiendo el concepto de “original”. En la era analógica un cuadro era único porque si querías otro tenías que pagar al pintor para que lo hiciera y eso requiere de un pintor, mucho trabajo y el resultado no tiene por que ser idéntico. Sin embargo la limitación artificial de sacar sólo X copias de una fotografía es ridícula. Las 100000 copias que se hagan de una foto pueden ser idénticas, mas aún ahora con la foto digital. Por tanto el comercio con series limitadas sólo lo veo como un traslado del comercio del arte en sus formas clásicas, pero forzado y que ha perdido el sentido por el camino.